13 may 2012

Nocturno en otro cuerpo VII


Este es un barrio de casas lindas y bien pintadas. De gente buena pero que no abre sus puertas a desconocidos. Que cocinan a sus animales luego de engordarlos. Y no convida. No hay sobras en la basura porque se tragan hasta los huesos. Acá no se come ni se duerme, dicen los carteles. Y este no puede ser el lugar. Estos bancos no son mi cama. En este pasto no puede jugar el gato. Acá no se puede dormir porque las estrellas brillan más que en otro lado y nosotros dos necesitamos mucha oscuridad. Porque en la oscuridad nos olvidamos de nosotros mismos. Dejamos de existir. No hay hambre ni dolor ni llagas en los pies. Necesitamos el sueño para seguir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario