24 feb 2012

De los tipos de personas y sus recursos literarios II

Hoy quisiera detenerme en dos personalidades que han llamado mucho mi atención, principalmente si tomamos en cuenta un estudio apócrifo de Freud sobre estos trastornos de personalidad.
Hoy, por tanto, me referiré al hipalagista y al sinestésico.
Estos individuos recorren y pueblan el mundo sin que nadie se percate de su existencia. Sus respectivas personalidades son menos visibles que profundas, y se instalan en la mente de cada uno sin que nos demos cuenta. 
Ambas personalidades son diferentes, pero esconden adjetivos entre sí. Veamos las primera.
Hay psicólogos conocedores que leyeron con atención a Lacán, que al entrar al diván lo primero que preguntan es: ¿dónde está su amigo? Si uno responde sin dudarlo, este sabrá que se encuentra ante un caso de hipalagista. Es difícil de contactarse con un hipalagista, porque nunca se sabe dónde puede estar. Así, en la feliz mañana, se puede encontrar en un puesto de chorizos; como en la solitaria noche en la juguetería. Por lo general son aquellos que se rehúsan a tener celular, entrar en las redes sociales o pasarte su teléfono. Una de las ofensas más grandes que se le puede proferir a un hipalagista es preguntarle si viene solo, pues, él nunca está solo. 
En cambio el sinestésico es un ser sedado por naturaleza. Suele confundirse con los metafóricos, por su carácter etéreo, suave y esponjoso. Estas personas tienden a la religiosidad y experiencias místicas, muchas veces acompañadas de sustancias psicoactivas. No se recomienda el uso de hongos. 
Reconocemos al sinestésico por su amabilidad en el trato y la dulzura de sus palabras. Especialistas han detectado que el político sinestésico regala caramelos o un litro de vino antes de dar su discurso. Y los poetas sinestésicos pueden causar estragos entre su audiencia, provocando efectos adversos y contrarios como la anestesia. 
De todos modos, aun no se ha establecido un estudio serio y pormenorizado, y no se han detectado casos clínicos de patologías severas ni trastornos en estas personalidades.
Se recomienda, en caso de ser alguno de ellos o tener un amigo o familiar hipalagista o sinestésico, la ingesta sistemática de boldo y chocolates.     

6 comentarios:

  1. Me gusta porque tiene más variantes que un horóscopo clásico... ;)

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  2. qué suerte! te encontraste en alguno?

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  3. Faa... Es complicado. Me gustaría ser oximorónico, ya que coincido contigo en que tienen algo especial y llamativo; pero en realidad, en la difícil tarea de auto-analizarme, descubrí en mí algunos aspectos de los hiperbólicos, de los sinestésicos y también de los que se rigen por el políptoton... Mejor espero a que salga la tercera parte (si es que esta existe), tal vez en ella encuentre mi espejito... :/

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  4. dado el éxito, seguro será la última entrega. pero no os alteréis! alguna solución encontrarás

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  5. Le tengo fe a la última entrega... ;)

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